jueves, 17 de septiembre de 2009

Bendito sea... el error

Bendito sea, el error que me enseña...
Bendito sea, el error que me ayuda a crecer...
Bendito sea, el amigo que me acompaña, me comprende, me apaña...
Pero más bendito todavía el "enemigo" que me plantea el desafío de aprender"lo", aceptar"lo", limar asperezas y valorarlo... que me da la posibilidad de una mirada nueva... que pone ante mí la posibilidad de un nuevo "enfoque".
Pone frente a mí sabores nuevos, que tengo que aprender a "digerir".

Benditos los espejos que me devuelven el resultado de mis acciones, y me dan las pautas para "enderezar" el rumbo... o tal vez me confirman que tanto empeño vale la pena, que el rumbo es el correcto, y allá en el horizonte hay mucho más por descubrir...

Benditos sean, los seres que rodean mi alma. Cercanos, próximos, lejanos...

Bendito Dios... por haberme puesto aquí!.

Graciassssssssss!!!

(Dedicado a todos esos, que mueven mis fibras día a día, y me hacen lo que soy!)