Hebra, Trama, Urdimbre, Hilacha...

Tejido...

Red...

Entretejido...

Qué hilo es más importante? Sin urdimbre (que es el hilo detrás de los hilos, ese que no se ve) no hay tejido, no habría trama.

Sin hebra, la urdimbre no tendría sentido. No habría colores, formas, textura...

Sin necesidad de una trama, la urdimbre y la hebra jamás se unirían con un sentido común.

Y sería imposible que la hebra y la urdimbre hicieran lo suyo sin "mostrar en algún punto la hilacha".

Y las manos del que teje??? Habría alguna posibilidad de que urdimbre, hebra, trama, hilacha, tuvieran un sentido sin las manos del que teje???

Cuál de ellas podría decir que es más importante o menos, si no existieran las manos que les dan sentido???

Nuestros aborígenes, ex-profeso, cuando tejen telar, dejan deslizar un error en el diseño, para no olvidar que el único "tejedor" perfecto es su DIOS, con el nombre que cada pueblo tiene... pero coinciden en eso, en destacar que el único tejedor sin defectos en su producción es DIOS... no se juzgan ni critican, sino que se "equivocan" como acto de humildad, como mensaje cósmico de su propia "humanidad".

En estas dos semanas, fui hebra, urdimbre, para algunos hilacha, pero formé parte de la trama, de eso no hay dudas.

Recibí cosecha de mi siembra, a través de Charo, desde Tarragona, por correo de amor y colaboración desinteresada.

Recibí cosecha de Alex y Diego, en una obra conjunta que llena mis oídos en clave de sol, y mis ojos en diseño tribal.

Recibí cosecha de mar, de Lucas, que a pesar de mi insistencia, jamás esperé que se concretara.

Recibí cosecha sincera de felicitación de Butterfly, Grace, otras no tan sinceras, y también estertores que hubiera preferido no vivir, pero la vida es eso. Una de cal, otra de arena.

Y todo, parte de la trama, de el tejido que es mi vida, que no deja de maravillarme.

Alegrías y decepciones en la misma medida y para equilibrar.

Me quedo con la palabra "decepciones" y me la llevo para analizar: Si me decepciono es porque espero. Si espero, estoy esperando según mi métrica y me pierdo de ver al otro como realmente es, y creo que ya habíamos reflexionado eso, pero... parece que falta.

Gracias a todos los que en estos días llenaron mi vida de estallidos felices. Mis oídos de música e imagen. Mi tiempo de grata compañía. Mi futuro de maravillosos proyectos.

Gracias por estar!!!