Cuestión de llaves...

Que todo es cuestión de llaves...

A veces no comprendo, pero es cuestión de llaves, eso está comprobado.

Que si ambos nos relacionamos con la misma persona, cabe la posibilidad de que la veamos diferente.

Que yo vea una persona agresiva, con la que no se puede hablar, malvada, y tú encuentres el dulce de su alma, tengas una relación armónica y de afecto, y saques lo mejor de ella. O tal vez viceversa...

Es que creo que cada uno de nosotros tiene una llave diferente. Tal vez tú tienes la llave que abre el casillero más hermoso de su alma. Y tal vez yo no.

Lo racional en estos casos, lo que la mente indica, para protegernos del sufrimiento es: Seguir nuestro camino, olvidar ese corazón y usar nuestro manojo en otra persona, tal vez allí tengamos más éxito y abramos el compartimiento que contiene lo mejor de sí!

Y la razón no suele "equivocarse", y sugiere la mejor opción, la más práctica, la más directa, de entre las conocidas y acumuladas en su intelecto... Pero, porque todo tiene un pero, y la mente no es perfecta... Estas llaves de las que hablo, no tienen nada que ver con lo "racional", y a veces, sin motivo, uno queda ahí, impotente frente a la puerta intentando, cambiando llaves, golpeando, o simplemente en silencio, esperando...

Y el día menos pensado, a la hora menos esperada, la puerta que estaba cerrada tal vez con mil cerrojos diferentes... o bloqueada con pasadores... o simplemente entornada, mientras me empecinaba en buscar una llave que no era necesaria... se abre...

Y el otro comparte contigo lo mejor de sí... porque ese es su momento elegido.

Porque el tiempo no existe en realidad... y los tiempos de Dios no tienen nada que ver con los tiempos de los hombres...

Te deseo hoy que tus llaves abran siempre las mejores puertas en los otros. Y que si en el primer intento no lo logras, jamás pierdas las esperanzas!!!

Buen comienzo de semana!!!