Los libros... que me hablan

Estoy convencida de que los ángeles, le hablan a cada uno, en el lenguaje que está acostumbrado a escuchar.

En mi caso, suelen hablarme mucho en libros... en películas, hasta en canciones.

Y llegan a mí de las formas menos premeditadas, más sincrónicas que puedan llegar a existir, será por eso que los escucho...

Cómo puede saber un libro lo que pasa en mi interior en determinado momento de mi vida?... Un libro no es un ser vivo... si fuera un amigo, vecino, hasta una mascota lo creería... pero un libro?

Y Francesco... me habló... en todo su contenido, pero más aún en su capítulo Almas Gemelas. Espero que Yohana García no se enoje, por transcribir estos dos párrafos. Y espero que sirva, para todos los que lo lean!

(Charla entre Francesco y Cupido, el ángel del Amor)

• F.: Tu flechas a alguien; el ser amado le corresponde, se juntan y son felices. Qué pasa si uno se enamora de otro y ese otro no lo toma en cuenta? Ese amor, sería un amor platónico?

• C.: Si hago trampa, si flecho a uno sólo, es porque esa persona que se enamora de alguien que no lo ama, necesitaba una ilusión, necesitaba baterías para vivir, necesitaba tener, en su mente y en su corazón, una esperanza. Vive gracias a ese amor de uno solo; puede pasar mucho tiempo y no lo puede sacar de adentro de su corazón.

• F.: No te parece triste enamorar a una persona sola? No crees que se sufre cuando alguien no te quiere?

• C.: Sí, es fuerte, pero es necesario para que sienta que está viva. Ya llegará el amor a su debido tiempo; es necesario para que se le abra el canal del amor.

Sí... tal vez me flechó a mí sola...

Sí, es cierto que necesitaba en ese momento una ilusión, porque ya no había en mi interior. Creí que nunca más iba a enamorarme, y no fue así. Me sentí revivir, me sentí bella, sentí que existía, y ese amor, fue el principio de mi amor, POR MÍ.

Quería compartirlo, y quería agradecer hoy, a quién estuvo del otro lado de ese amor. Que a pesar de no sentir lo mismo por mí, se comportó con respeto. Dejó fluir, no engañó, que hubiera podido. Jamás se hizo cargo, de lo que yo sentía, y desde su "particular" forma de aclarar las cosas, dejó que esto dure, todo lo que YO necesité que dure...

Una hoja en mi tormenta.

Gracias Francesco, y nuevamente gracias a todas las sincronicidades que pusieron la voz de MI ANGEL en mi camino.

Buen fin de domingo!!!